INDIGNACIÓN POPULAR
Lo siguiente es mi punto de vista unicamente, que refleja, por supuesto, lo que he venido "mamando" estos días en los distintos medios de comunicación acerca del tema por tratar. Ni me pongo camisa de priista ni me doy baños de pureza, y espero hacerme entender.
Hubo un empresario, perteneciente a una de las familias más prosperas en dinero e industrias acá en la Sultana del Norte, de nombre Fernando Canales, que enarbolado en la causa del Partido Acción Nacional, se postuló en 1985 para la gubernatura del estado de Nuevo León, siendo su competidor para el mismo puesto un político de la pura cepa priista un tal Jorge Treviño, el cual vino resultando triunfador en un proceso a todas leguas amañado, según el clamor de los panistas, que vieron el arrebato del triunfo que su caudillo sufrió. 12 años, equivalentes a 2 sexenios, después, de nuevo Fernando Canales isó la bandera de su partido en busca de que Acción Nacional ocupara por vez 1a la silla gubernamental. El pueblo, cansado de muchas anomalías, además de tanta "transa" que se aventó el gober en turno Sócrates Rizo, optó por el cambio, y ello significó la perdida del gobierno del pri para pasar al PAN. Todas las iniciativas, sueños y espectativas que durante más de 12 años mantuvo Canales podría de ahora en adelante expresarlas.
Iniciativas, sueños y espectativas que a a 10 meses de su "conclusión" mágica y de ley, decidió abandonar nuestro hasta hace 3 días gobernador, por un puesto -nada más la Secretaría de Economía- en el gabinete presidencial. Muchos argumentos del porqué de esta jugada por debajo de la manga se han manejado; a mi solo me inquietan 2 cosas: 1) el poco valor ético del sr. Canales. Yo se que ahora ya no son tiempos de morirte con la camiseta puesta y de la lealtad indivisa, pero por otro lado don Fernando no es un jovencito junior -como los ha de haber y el mismo los ha de conocer- que cambian su coche en cuanto sale uno mejor. Si alcanzó un sueño, hay que terminarlo hasta abrir los ojos y no cambiar de caset a media madrugada; los grandes lo consiguen, y se constata que él no está entre ellos. 2) yo no se -y que flojera averiguarlo, la verdad-, cual sea la profesión del sr. Canales; el puesto que ocupará es el de Secretario de Economía: la lógica indica que dicho lugar debería ser ocupado por un economista. Pero como la lógica a veces no sale a relucir, ahi va dar a dicha oficina un cuate del "cambio". El miedo que me entra es la indiscrimada venta del pais que se está por venir, pues entre cuates salen los negocios mejor, y si de alguien es cuate don Fernando es precisamente de la cúpula empresarial.
........................ ...............................
Mi vuelta por la en algún tiempo capital de la Nueva España fue aunque breve muy enriquecedora: sobre todo intergrarme al reconocimimento que humana y humildemente se le hizo a Don Evaristo, que 25 años de soñarse y vivir como sacerdote de Cristo y de Don Bosco para la juventud le colocan entre los grandes.
........................ ...............................
A propósito de sueños, de Lubia María Hevia...
Hay sueños para los cuerdos,
hay sueños para los locos,
hay sueños para las piedras,
hay sueños para los muertos,
hay sueños para la tierra.
Yo sé los sueños que quedan,
los sueños que todavía
andan vibrando en nosotros,
regando con alboroto
su misteriosa armonía.
Yo sé los sueños descalzos,
desnudos, dueños del día,
fraternos, vírgenes, mansos,
reveladores del cántaro
de la poesía.
Hay sueños que se nos duermen,
hay sueños que llegan tarde
pero encuentran su estación.
Los sueños son ese instante,
la luz que ve el caminante
debajo del corazón.